martes, 21 de abril de 2020

En el mes del idioma


libros e historias de audio para niños y estudiantes de todas las edades, los niños de todas partes pueden escuchar una increíble colección de historias en seis idiomas diferentes, que los ayudarán a seguir soñando, aprendiendo y simplemente siendo niños. Todas las historias son gratuitas en su computadora, teléfono o tableta usando el siguiente enlace:

Para los maestros y padres y madres de familia. Hay historias en seis idiomas.


Un vídeo muy creativo.



domingo, 19 de abril de 2020

Grados 8º y 9º


Actividad

Diviértete desde casa.

Con ayuda de material disponible en tu casa o jardín puedes recoger material para realizar tu propio cuento y con la ayuda de un celular puedes tomar diferentes fotos y así crear el cuento como si pasaras de página.


Ejemplos.

   Especial vuelta al cole: robots reciclados y otros cuentos verdes Resultado de imagen para cuentos hechos con material reciclable ...

sábado, 18 de abril de 2020

Grado: transición y primero.



Objetivo: fomentar el uso adecuado de las palabras, según su contexto de uso y sentido, como fuente poderosa para la sana convivencia, dentro y fuera de la institución.

Iniciemos divirtiéndonos 




Con la ayuda de un adulto, Se realizan preguntas orientadoras, tales como:

- ¿Crees que hay palabras que tienen poder?
- ¿Conoces algunas palabras poderosas? ¿Cuáles y por qué las consideras poderosas?
- ¿Sabías que en el mes de abril se celebra el día del idioma, pero también el día del libro y del autor, también el día del árbol?

Ya estamos listos para la actividad.

Se realiza la lectura en voz alta del cuento “El león que no sabía escribir”, de Martin Baltscheit, que se encuentra disponible en el siguiente enlace:
https://carmenelenamedina.wordpress.com/2018/01/12/el-leon-que-no-sabia-escribir-2/
.
En este momento emerge la creatividad.

En una hoja de block se escribirá una letra del alfabeto y se realizará un dibujo relacionado a una palabra que comienza con dicha letra; con ayuda a un adulto se elegirá la palabra que deberán escribir y la imagen que harán, apuntando a la sana convivencia.

Se realiza un “palabrero o diccionario literario” con algunas letras del alfabeto, ejemplo:

  • Con A … dibujará un corazón y se escribirá en tamaño grande la palabra  Amor”
  • Con B … dibujará unas manos y se escribirá en tamaño grande la palabra  Bondad”

Las palabras deberán apuntar a la reflexión en torno a la sana convivencia.

Algunos ejemplos son: Respeto, Autocuidado, Responsabilidad, Alegría, Altruismo, Autodominio, Autonomía, Capacidad, Caridad, Colaboración, Compasión, Empatía, Esfuerzo, Felicidad, Fidelidad, Franqueza, Justicia, Honestidad, Independencia, Integridad, Gratitud, Gracias, Lealtad, Misericordia, Optimismo, Paciencia, Perseverancia, Prudencia, Puntualidad, Responsabilidad, Sabiduría, Superación, Sacrificio, Sencillez, Sensibilidad, Tolerancia, Servicio, Sinceridad, Solidaridad, Voluntad… entre otras.

Al finalizar y al haber realizado tu propio diccionario pegalos como un cuaderno y hazle una portada por ejemplo lo puedes llamar " El poder de las palabras".

¿Qué aprendimos sobre el poder de las palabras, para qué te sirven?
¿Crees que podemos lastimar a alguien cuando le decimos palabras groseras? ¿Cómo te sientes cuando un compañero te dice palabras groseras?


lunes, 13 de abril de 2020

Pingüino



Había una vez un pingüino que vivía en el Polo Norte que, cansado de pasar frío, decidió irse a vivir a la selva.
- ¡No digas tonterías! - le decía su familia.
- ¿Qué vas a hacer tú en la selva, con el calor que hace? -le decían sus amigos.

Pero el pingüino era muy cabezota y tenía muy claro lo que quería.
- Mañana me iré -dijo-. Voy a dormir un poco para reponer fuerzas.

A la mañana siguiente, el pingüino se fue de polizón aprovechando que zarpaba un barco de científicos que habían estado estudiando las costumbres de los pingüinos en el Polo Norte.

Tardó mucho en llegar a la selva, pero lo consiguió. Pero cuando llegó ya estaba medio muerto. Apenas había comido en los últimos días y estaba reseco.

En un último esfuerzo por sobrevivir, se metió en una charca a bañarse, pero el agua estaba tan caliente que el pingüino tuvo que salir en cuanto se metió.
- Tendré que comer algo -pensó el pingüino. Pero por allí no había nada que el pingüino pudiera comer.

De repente, el pingüino oyó un ruido aterrador. Miró y vio a lo lejos un animal a rayas que caminaba a cuatro patas y que tenía unos enormes bigotes.

- ¿Qué es eso? -dijo el pingüino.
- ¡Corre, corre! -dijo una lagartija que pasaba por allí-. ¡Es un tigre! ¡Y está hambriento! Vete antes de que te coja para la cena.

Pero los pingüinos son bastante lentos caminando. Era imposible que saliera de allí con vida.

Entonces… imagínate un final diferente.

- ¡Despierta, despierta, pájaro bobo! Si quieres irte tendrás que hacerlo ya. Hay un barco a punto de marcharse y podrás irte de polizón en él.

Era uno de sus amigos. No estaba de acuerdo con su decisión, pero, a pesar de ello, la respetaba.
- ¿Sabes qué? -dijo el pingüino-. He cambiado de idea. Puede que esté harto de pasar frío, pero aquí tengo a mi familia, a mis amigos, tengo comida, agua y ya conozco todos los peligros a los que me expongo.
- Entonces, ¿te quedas? -preguntó su amigo.
- ¡Me quedo!

Y así fue como el pingüino que quería vivir en la selva cambió de opinión. Desde entonces disfruta mucho más del frío, de los baños y de los peces que come.